Centro de recepciones en Ajuria Enea

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Centro de recepciones en Ajuria Enea

Centro de recepciones del Palacio de Ajuria Enea

Año: 2019

Estado: Concurso

Situación: Vitoria-Gasteiz, Araba

Arquitectos: TAPER + Gurtubay arquitectos y asociados

Promotor: Gobierno Vasco

Infografías: Alex Ruiz

«El bosque sagrado ha sido también, antes de nada, escenario de las reuniones de carácter político y social, ya fueran asambleas vecinales o parlamentos de una tribu, un pueblo, una comarca o un país. La imagen del consejo o asamblea del bosque continúa presente en nuestro imaginario colectivo de muchos modos distintos. (…)

 

Ignacio Abella, «El bosque sagrado. Creencias, mitos y tradiciones de los pueblos cantábricos».

 

El complejo edificatorio de Ajuria Enea, presidido por su palacio, está compuesto por un total de cinco edificaciones repartidas a lo largo de una parcela en la que prevalece la vegetación. El nuevo centro de recepciones aparece como una nueva pieza que viene a sumarse al complejo y que busca su integración en ese paisaje tanto vegetal como arquitectónico. La escala de la pieza, la materialidad y el ritmo exterior de la fachada, junto con el juego de reflejos y transparencias buscan esa integración paisajística.

 

En una primera aproximación nos encontramos con una pieza sobria, caracterizada por el ritmo de sus fachadas, que responde al carácter institucional de este tipo de espacios. Su isotropía exterior responde a su condición de «objeto», de pequeña caja o pabellón, a medio camino entre lo público y lo doméstico.

 

La fachada exterior, marcada por su verticalidad, está compuesta por lamas de madera de roble, apareciendo como árboles que se suman a la vegetación existente. Por otro lado, fragmentos de espejo sobre la coronación de la pieza tratan de capturar los tonos verdes del bosque en un juego de reflejos que contribuye a la integración de la pieza y a la disolución de los límites interior-exterior.

 

La expresividad de la fachada y su connotación tradicional marcada por el ritmo y la repetición da paso a un interior menos reglado y mas aséptico y adaptable. Es precisamente esa dualidad entre tradición y vanguardia la que el centro de recepciones quiere transmitir, siendo una idea que se repite a lo largo de todo la propuesta.